Las pasiones ordinarias. Antropología de las emociones de LE BRETON, DAVID

La unidad de la condición humana, especialmente bajo la égida de la dimensión simbólica, es esta capacidad humana de crear significado y valor, de construir vínculos sociales, significa la diferencia que es a la vez colectiva e individual, es decir, la sucesión de culturas y dentro de ellos las formas únicas en que los individuos encajan en ellos. Las percepciones sensoriales, donde el sentimiento y la expresión de las emociones parecen provenir de la intimidad más oculta del sujeto, son sin embargo formas menos sociales y culturales. Los movimientos que nutren la relación con el mundo y pintan su presencia no provienen de una fisiología pura y simple, no de una psicología, ambos se vinculan a una simbología corporal para darle significado, se nutren de una cultura afectiva que el sujeto vive a su manera. De esto se trata este libro