Patanes y bárbaros. La apuesta del nosotros de

Debo admitir que la palabra ingresos es muy extraña. Y, aunque me cuesta convencerme de que esta unión es posible, no puedo quedarme con la idea de que no se ha intentado todo. Entonces debemos comenzar con lo que puede prevenirlo. Decir que la tierra está minada es quedarse corto: un Estado-nación construido sobre la esclavitud y la colonización, organizaciones políticas comprometidas con el pacto nacional-racial, un chovinismo de izquierda que poco a poco apaga el internacionalismo de los trabajadores, una sociedad civil indiferente a los estragos del imperialismo y la profunda asimetría de sentimientos entre los sujetos blancos y poscoloniales. Estas son algunas de las manifestaciones del estado integral de la raza que se comparten en este libro.